La iglesia inacabada

El edificio más llamativo de Castaño del Robledo es sin lugar a dudas "El Monumento" o "La Iglesia Inacabada" o La Iglesia del Cementerio" o "La Catedral de la Sierra" como yo suelo bautizarlo. ¡Qué pinta un templo digno de una ciudad en un pueblo de apenas 200 habitantes! Es más que lógico el surgir de leyendas en torno a esta aparentemente inexplicable construcción. Una cuenta que los jesuitas adelantándose a la huida de la ciudad dicidieron montarse un refugio alternativo como ya lo ha hecho Arias Montano en su tiempo en la Peña de Alájar, solamente esta vez a lo grande. Pero los jesuitas fueron expulsados de España y la obra se quedó a medio terminar. Otra cuenta que el arquitecto fuese fusiliado por los franceses durante la ocupación napoleónica, mientras otra habla de un suicidio, obviamente tirándose desde la torre por motivos no muy claros, pero con resultado idéntico: la no conclusión de la obra. El arquitecto Alfonso Jeménez Martín que promovió la exposición "Castaño: La agonía de un pueblo andaluz" en 1977 aclaró en el catálogo la historia real de esta iglesia que reproducimos a continuación:

 

LA IGLESIA INACABADA

La Iglesia a finales de los '80
La Iglesia a finales de los '80

En las afueras de Castaño, hacia el norte, existe uno de los monumentos más impresionantes de toda España. Nos referimos a lainacabada iglesia que se labraba, a fines del XVIII, para sustituir al templo del XVI que acabamos de ver. Sus bóvedas abiertas, los muros de ladrillo carcomidos por la yedra, las tumbas que llenan sus capillas, los dibujos que cubren sus paredes... nos traen a la memoria iglesias de misiones jesuitas del Paraguay, abandonadas en medio de la selva.

Tenemos muchos datos que permiten reconstruir su historia burocrática y su proceso de construcción; a la vez nos traen noticias de los arquitectos que la concibieron y levantaron. El interés del edificio no solo radica en su valor arquitectónico intrínseco, acrecentado por su carácter de ruina, sino en los problemas históricos, ya sean artísticos, económicos o sociales, que plantea y resuelve.

La documentación que poseemos está compuesta por un legajo que contiene copia de toda la correspondencia que originó el caso, las cuentas pormenorizadas de la obra, el propio templo inacabado y, lo que es verdaderamente insólito, una larga serie de dibujos arquitectónicos ("planos de montea") en sus paredes (1). De estos documentos hemos manejado extractos o calcos que hemos hecho personalmente. (2)

La bóveda sin terminar
La bóveda sin terminar

El primer legajo relata como en Noviembre de 1.783 se pidió al Procurador de Fábricas del Arzobispado la ampliación del templo parroquial de Santiago el Mayor, ya que la población había crecido de forma desmesurada; con este motivo viaja a Castaño J. Alvarez (3), Maestro Mayor de obras del Arzobispado, que informa en Mayo de 1.784 de la posibilidad de ampliar el edificio invirtiendo su orientación, pero finalmente rebate su propuesta y aconseja hacer uno nuevo con las siguientes características: ".. un cañón de capillas hornacinas, crucero, presbiterio y demás servidumbre...". El Procurador acuerda que se haga un proyecto de nueva planta, cuya construcción correría a cargo del Arzobispado, la Capilla Real de Granada y los propios vecinos, pero toda la consignación procedería de los "efectos decimales" que estos últimos producían. En Noviembre de 1.784 informa Antonio de Figueroa, Maestro Mayor de obras de fábrica de esta dicha ciudad y su Arzobispado..." (4) que había estado en Castaño, a fin de buscar emplazamiento para el nuevo edificio y ".. se resolvió a formar y presentar plano ... con arreglo al pensamiento y distribución que previene el Maestro Mayor José Alvarez..."; así quedaría una nave de 11 varas de anchura, con un número indeterminado de capillas (no se conserva el plano), torre de 6 varas de lado, presbiterio, crucero, tránsito, colecturía, sacristía, osario, patinillo y común; además llevaría tres portadas, la principal "con su frontón y tres remates de vidriado..." y que los "movimientos de Archithectura sean con arreglo al orden dórico...". A continuación informó el Maestro de Carpintería, F. del Valle(5), sobre datos de su competencia. La inversión prevista, sin contar la cimentación, se preveía en cuatrocientos setenta y seis mil ciento ochenta y cinco reales. A la Capilla Real le pareció una cantidad elevadísima y pidió que se redujera el proyecto a lo mínimo indispensable. En Septiembre de 1.785 A. de Figueroa se reafirma en su postura, pero la Real Capilla insistió en no gastar sus rentas en tan".. sumptuoso y magnífico ... Plano ...". El Procurador pidió al Maestro Mayor F. de Rosales que terciara en el caso; este opinó que se redujera la longitud en seis varas y la anchura en una, lo que se conseguiría cómodamente acortando el pitipié (escala) del plano en una onceava parte. En Noviembre del mismo año informan Rosales y Figueroa conjuntamente para explicar como que daba el plano tras la reducción; el costo se redujo mecánicamente en una onceava parte también (6).

La Capilla Real aceptó esta última propuesta y con arreglo a ella se ex pidió titulo de Director de la obra a nombre de Januario Sández el 4 de Marzo de 1.786.(7).

La puerta de la epístola
La puerta de la epístola

Continuemos con el segundo de los documentos mencionados ya que, aunque el anterior aún sigue, parece preferible respetar el orden cronológico. El "Libro de cuentas y Razón de la Construcción de la Nueva Parroquia... (de) ...Santiago el mayor... que se dio comienzo el 12 de junio de 1788...por su Admor. D. Yanuario José Longuinos Sandez." consta de trece cuadernos titulados: Maestro, Oficiales, Piedra, Sierras, Ladrillos, Arena y Sierras, Ladrillos, Cal, bestias, Carretas, Fierro, Madera, Carpintero (sic), Esparto y Varios Gastos(8). De aquí se deduce que el 10 de Junio de 1.788 se había contratado como maestro a Alonso Sánchez, (9), que los trabajos previos comenzaron dos días más tarde, pero la obra en sí no empezó hasta Julio. Las citadas cuentas permiten deducir que las obras se llevaron a buen ritmo hasta Mayo de 1.789, cuando J. Sánchez, a instancias del maestro Alonso pidió permiso al Procurador para que se eliminara la puerta lateral de la Epístola y se abriera una a los pies del templo, argumentando razones de comodidad e higiene (10); el Procurador pide al "Maestro Mayor de obras de este Arzobispado a quién tocó por turno..." un informe. El mismo mes comparece A. de Figueroa para decir que no se le había olvidado dibujar la puerta en el plano ni nada parecido, sino que prescindió de ella para ganar sitio para el coro (11), pero sobre todo porque "la observancia de la Archithectura como la previenen los Autores en que dicen, que las Yglecias de una sola nave no se les ponga puerta a los pies..."; admitió el cambio finalmente siempre que la portada constase simplemente de un zócalo, pilastras encapiteladas, entablamento, frontón y remates vidriados. Las partes aceptaron el dictamen, pero la Fábrica (12) pide, en Octubre de 1.789, que el "maestro mayor a quien había tocado en turno..." inspeccioase la obra, que ya había salido de cimientos, para que solucionara el problema que había creado A. de Figueroa al comprar un terreno tan ajustado al rectángulo del edificio, que no podría entrar a él ni acopiar materiales. Al problema se agregaba una nueva dificultad, ya que, por Real Orden de 5 de Noviembre de 1.787, era obligatorio el visado de la Real Academia de San Fernando para todo proyecto de edificio público (13).

Mientras tanto la obra, como se deduce de las cuentas, se había ido parando poco a poco: así los materiales dejan de acopiarse desde mediados de Noviembre y el personal fue despedido el 4 de Diciembre de 1.789.

El Monumento con su nueva cúpula (renacentista?)
El Monumento con su nueva cúpula (renacentista?)

>En Marzo de 1.791 vuelve a comparecer Figueroa (14). Declara que los muros del edificio alcanzaban ya una altura de tres a cuatro varas; que la actuación "de la Real Academia de San Fernando consiste en transtornar los (planos) que allí se presentan..." por lo que recomienda el incumplimiento de la Orden, para evitar lo que había sucedido en San Juan de Ecija (15); valoró lo ejecutado en ciento veintinueve mil novecientos veinticuatro reales, e informa de la necesidad de comprar más terrenos. El último documento de todo el legajo, que está encuadernado y por tanto no le falta nada, es el nuevo permiso otorgado a J. Sánchez el 1 de Abril de 1.791.

Las cuentas se reanudan el 26 del mismo mes y bajo la dirección de A. Sánchez, la obra comienza a funcionar a mediados de Mayo. Dos años más tarde, Julio de 1.793, los materiales comienzan a escasear, cesando los acopios en Diciembre, pero el personal no fue despedido hasta el 4 de Mayo de 1.794-. En este punto cesa toda la documentación y con ella la obra del templo por causa que desconocemos (16) pero que deben relacionarse con la falta de recursos económicos <(17).

La documentación aportada hasta ahora demuestra los siguientes extremos:

1. Es difícil atribuir a uno de los Maestros Mayores la paternidad de una obra concreta., salvo en el caso de que se conozca toda la documentación y ésta no deje lugar a dudas. Una sola intervención documentada o unas trazas no demuestran nada; menos útiles aún son las concomitancias formales de elementos decorativos pues, como veremos más adelante, no son de la exclusiva responsabilidad del Maestro Mayor de Turno.

2. La actuación del Maestro Mayor puede llegar a ser bastante frívola, por no decir falaz, como demuestra la de Figueroa en este caso; por tanto alguien debía suplir estas deficiencias para que la obra fuera factible (18).

Sin embargo, aún cabe hacer otras consideraciones, basándonos en el examen de la obra inacabada. Se trata, efectivamente, de una nave cubierta con bóveda de cañón, con cinco capillas a cada lado, pero conectadas entre sí, a la manera de II Gesú de Vignola; lleva crucero, presbiterio, torre, baptisterio, sacristía, sagrario (?), colecturía (?), osario (?) y patinillo. Es de orden aproximadamente dórico, pero tiene coro alto, tres suntuosas portadas, sobre todo la de los pies, casi once varas de anchura en vez de diez, seis la torre en vez de cinco y todo en general sigue las ideas de Alvarez, interpretadas por Figueroa, pero con notable y extraordinaria calidad de diseño y ejecución. Dado que Figueroa, en diez años, visita Castaño dos veces, y que Alonso Sánchez cobró 481 jornales en la primera etapa (542 días naturales) y 1090 en la segunda (frente a 1105), parece probable que este último fuese el responsable de tales modificaciones, que ya estaban decididas cuando Figueroa inspecciona la obra en el primer trimestre de 1.791 (19).

Los famosos dibujos
Los famosos dibujos

Para completar el cuadro documental recordaremos que las paredes interiores del edificio muestran unos dibujos arquitectónicos, realizados como esgrafiados hechos con regla y compás sobre enlucidos finos de cal, que representan los trazados de cornisas, espirales de capiteles jónicos de tamaño excepcional, alzados de portadas o retablos, trazados geométricos sin finalidad aparente, etc., es decir todo el repertorio decorativo que quedaba por labrar para la conclusión del templo. Como en el caso anterior el autor de estas invenciones no pudo ser sino Alonso Sánchez, que demuestra ser, además de un excelente maestro de obra, todo un tracista, buen conocedor de los sistemas formales clásicos y de sus leyes compositivas (20).

Estos datos nos permiten añadir las siguientes conclusiones a las dos establecidas anteriormente:

1. En lugares alejados de Sevilla, o Ecija, el Maestro Mayor de turno limitaba su actuación a dar idea de un tipo arquitectónico determinado, elegía el orden clásico que estimaba oportuno y completaba los esquemas gráficos con una detallada descripción del objeto arquitectónico que proyectaba y la manera de construirlo. El resto, que no era poco, quedaba al arbitrio del maestro que ejecutaba la obra, bajo una inspección lejana y difusa.

2. La fuente de los conflictos radicaba, generalmente, en problemas económicos más o menos encubiertos.

En el caso concreto de la iglesia de Castaño, volviendo al problema del "autor" del edificio que hoy contemplamos, se nos presentan tres posibles candidatos :

1. José Alvarez, que determinó las principales características del edificio, y en cuya obra encajaría perfectamente como última realización (21).

2. Antonio de Figueroa, que interpretó las ideas de Alvarez y dio las trazas del edificio (22).

3. Alonso Sánchez, que modificó las trazas de Figueroa, tanto en medídas, como en huecos, disposiciones decorativas, etc.

 

El interior hoy con material de la hermandad.
El interior hoy con material de la hermandad.

Al no haber sido terminado, el edificio se usó a partir de mediados del siglo XIX como cementerio. Se construyeron nichos en las capillas laterales para enterrar a los muertos como se hizo también en el suelo. Está función se mantuvo hasta los años cincuenta del siglo XX cuando se trasladaron los restos al nuevo cementerio en las afueras del pueblo. Finalmente La Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía restauró el edificio en 1992 - 1994 teniendo en cuenta que todo Castaño del Robledo es desde 1982 Conjunto Histórico-Artístico. Bajo las órdenes de la arquitecta Alicia Navascués se terminaron las bóvedas y la cúpula central. No era su intención terminar el templo. Por otra parte la historia nos dejada numerosas muestras en el tiempo y en el espacio de edificios que por diversas vicisitudes no han llegado a rematarse según el proyecto original. (23) Se dejó guiar por los trazados de otras iglesias parecidas, ya sean de la Sierra, ya sean de la provincia de Sevilla.En todas ellas hemos podido analizar la geometría y proporciones de los diversos elementos arquitectónicos, atreviéndonos a aventurar cómo se hubiera rematado esta iglesia.(24) También se derribó el edificio adosado a la sacristía que servía de Club Juvenil, y se puso un suelo de hormigón en parte con empedrado. Ahora presenta un aspecto entre inacabado y no terminado, que no es lo mismo.En cuanto se finalizaron las obras, la Iglesia que durante casi 200 años se desentendió del templo sin acabar reclamó su propiedad, aunque ella no contrubuyó en nada en la restauración.. El día 3 de julio de 1997 se firma en Huelva un Convenio de Colaboración y Cesión de Uso entre el Ayuntamiento de Castaño del Robledo y el Obispado de Huelva. Los puntos más importantes son(25) :

Se usa en la actualidad para guardar las carretas de la Hermandad de los Angeles, herramientas del ayuntamiento y algún que otro festejo. Hay dos o tres actos culturales a lo largo del año. Sin embargo serviría de magnífico centro cultural comarcal, pero parece que falta la voluntad política. El escaso interés de los ayuntamientos de emprender proyectos comarcales, la visión localista de los políticos, además de la falta de una implicación de entidades financieras y empresas como patrocinadores (26) condenan al Monumento a ser la Bella Durmiente durante un tiempo sin definir.

 

Notas

  1. Los datos del templo proceden de una corta campaña de restauración que proyectamos y dirigimos en 1.972, para la Dirección General de Bellas Artes.
  2. Los datos del templo proceden de una corta campaña de restauración que proyectamos y dirigimos en 1.972, para la Dirección General de Bellas Artes.
  3. Según el examen que realizó en Marzo de 1.763, había nacido 32 años antes en la ciudad de Huelva y se formó al lado de su padre, Juan Alvarez. Según mis deducciones murió, o dejó de trabajar, en el verano de 1.785. Cfr.A.Sancho: op.cit.,250 ss; no estoy de acuerdo con el autor en el valor que da a este arquitecto, creo que supervalora a Antonio de Figueroa en detrimento de Alvarez.
  4. Sus datos biográficos pueden verse en Ibid.,203 ss.
  5. Ibid., 263.
  6. Evidentemente los espacios se podían reducir impugnemente, pero por razones tecnológicas no se podía hacer lo mismo con los muros.
  7. Era vecino de Castaño; en los Padrones Eclesiásticos no mereció el "Don" que él se pone.
  8. Como se comprenderá de estas cuentas se pueden sacar interesantísimas conclusiones de Historia Económica, pero no es ese nuestro objetivo en esta ocasión.
  9. Maestro desconocido hasta ahora. De su examen, efectuado en Octubre de 1.780, se deduce que era natural de Benacazón (Sevilla), que tenía entonces 33 años. Había aprendido con Pedro Díaz, que a su vez era natural de la vecina población de Umbrete, y había trabajado en Trebujena con Andres de Silva.
  10. Obsérvese que Figueroa, en Noviembre de 1.784, proyectó tres puertas, sin embargo ahora recurrirá a los Autores (?) para defender las dos puertas laterales contra la de los pies.
  11. Sospecho que esta curiosa teoría fue puesta en práctica por. Figueroa en las iglesias de Campofrio y Santa Ana la Real (poblaciones próximas a Castaño) cuando Alvarez ya había muerto y se encargó él de rematar ambas iglesias, cf r.A.Sancho — op.cit.,256.
  12. Así se designa en la documentación a la obra y sus agentes como institución.
  13. Cfr.C.Bédat: L'Academie des Beaux—Arts de Madrid. 1744—1808, Toulouse 1974, 251.
  14. El Procurador, en el año y pico transcurrido, le había solicitado mas de una vez que fuese a Castaño a informar; ignoramos las causas de la demora, aunque cabe relacionarla con las obras que dirigió por entonces en Algodonales (Cádiz), cfr. A.Sancho: op.cit., 212.
  15. Lea datos se encontrarán en J.Hernández et alii: Catálogo Arqueológico y Artístico de la Provincia de Sevilla 3, 155. Probablemente Figueroa estaba resentido con la Academia que le había quitado el encargo para dárselo al cordobés Ignacio Tomás.
  16. La tradición de Castaño es que el arquitecto fue fusilado por los franceses en 1.808. Desde luego Alonso Díaz no fue, pues consta que se marchó de Castaño cuando la obra se paró..
  17. Recordemos que la valoración de la obra ejecutada, con sólo un par de metros de altura, que hizo Figueroa suponía el 30 % del presupuesto total, sin incluir la compra de nuevos terrenos, ni las modificaciones posteriores que debieron ser costosísimas.
  18. Recordemos el affaire de los terrenos, los cambios de puertas, el recurso de los "Autores" y su silencio ante las modificaciones introducidas. su actuación en Campofrio es también bastante dudosa.
  19. Todas las modificaciones estarían patentes cuando el edificio, según Figueroa, ya tenía unas varas de alto. ¿Visitó la obra realmente?.
  20. Los dibujos son todos de parecidas características técnicas, lo que evidencia una sola mano, muy segura por lo demás. Algunos dibujos están coloreados; no hay ni la más leve huella de letreros.
  21. Alvarez insistió en la tipología usada en Castaño más de una vez: Bollullos de la Mitación, San Pedro de Jérez de la Frontera, Aznalcollar, Campofrío y Santa Ana la Real, quizás también la de Linares de la Sierra, próxima a Castaño. Las otras dos iglesias que diseñó de nueva planta fueron de tres naves.
  22. Ninguna de las obras diseñadas por Figueroa, o atribuidas a él, es de la tipología de la de Castaño.
  23. Alicia Navascués según Aurelio de Vega Zamora, La Sierra de Huelva - Hitos y Tradiciones, Huelva 2001, p. 55.
  24. bid. P. 55
  25. Es un resumen del original que se conserva en el Archivo municipal de Castaño del Robledo, que he podido consultar para aclarar dudas sobre el destino de la Iglesia Inacabada
  26. Plan de Desarrollo Sostenible del Parque Natural de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche, Consejería de Medio Ambiente, Junta de Andalucía 2004, P.170
La nueva cúpula desde dentro
La nueva cúpula desde dentro

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